Noticia publicada en el diario Las PROVINCIAS
La creciente desafección hacia los partidos políticos mayoritarios también tiene su correlato en el ámbito laboral. El desencanto con los sindicatos mayoritarios ha propiciado que formaciones que tradicionalmente han tenido una presencia testimonial en muchas empresas hayan comenzado a ganar protagonismo en algunos sectores a costa de los sindicatos mayoritarios. Uno de los beneficiarios de ese trasvase es la formación anarcosindicalista CGT, que en los últimos meses y solo en la provincia de Valencia ha sumado hasta 30 delegados procedentes de UGT o CC OO.
Según explica Enric Tarrida, secretari general de CGT-València, su formación cuenta con casi medio millar de delegados electos en la provincia de Valencia. Esa cifra se ha incrementado recientemente con la llegada de 30 delegados procedentes de otros sindicatos que todavía no están reflejados en los registros oficiales porque todavía no se han presentado a procesos de elección en las empresas, explica Tarrida.
Las causas de este proceso, que se ha acentuado desde la entrada en vigor de la reforma laboral, se encuentran en la «decepción» de los trabajadores con la acción sindical de los representantes de las plataformas mayoritarias, según destaca el representante de la CGT, quien también lo relaciona con el malestar por las condiciones reflejadas en los convenios renovados.
Entre los ejemplos de ese cambio de la representación hacía posiciones más extremas destacan sectores como el de la educación, el transporte por carretera o el telemarketing. Tarrida menciona el caso de la ONCE, donde el 75% de la representación sindical ha pasado recientemente desde CC OO a la CGT.
Otro sector en el que se ha producido un vuelco en los últimos tiempos es el marítimo, en concreto en los remolcadores. En este ámbito, el peso del sindicato en la representación se ha incrementado un 20% con cinco nuevos delegados en el último año. En Valencia, la CGT ya cuenta con dos de los cinco delegados, en Castellón con dos de dos y en Cartagena con dos de tres.
No obstante, el sindicato, entre cuyos principios se encuentra la «evolución» de los trabajadores «mediante la conquista, por ellos mismos, de los medios de producción, distribución y consumo», se ha visto afectado por la pérdida de afiliados como consecuencia de la crisis y el cierre de empresas. La plataforma asegura contar con unos 100.000, aunque no todos ellos pagan cuota.
En paralelo, UGT-PV y CC OO-PV continúan perdiendo afiliados y peso relativo en la representación. La formación que lidera Conrado Hernández cuenta con algo más de 11.600 delegados en la Comunitat, un 37% del total frente al 40% que tenía antes de la crisis. El año pasado perdió 8.000 afiliados, un 7,5% menos. Por su parte, CC OO perdió el año pasado unos 10.000 afiliados y cuenta con 12.200 delegados, casi un 40%.