Grupo Ilunión, la rama empresarial de la Once, también ha incurrido en la práctica cada vez más extendida de la cesión ilegal de trabajadores. Este abuso, que consiste en externalizar de forma irregular a parte de la plantilla para pagar menos a los empleados y privarles de otros derechos, tiene en esta ocasión el agravante añadido de que se producía con personas con discapacidad.
Se trata de empleadas que realizaban servicios de limpieza en Valencia para la firma Ilunion Hotels SA -antes Confortel Gestión SA-. La enseña de la Once, según trasladan a Valencia Plaza fuentes conocedoras de la investigación, decidió externalizar a 15 de sus trabajadoras a una sociedad del mismo grupo: Fondosa Lavanderías Industriales SA. Con este cambio, al aplicar un convenio laboral distinto a las empleadas, la enseña recortó un 24% el salario bruto de las empleadas.
De este modo, las trabajadoras pasaron de cobrar 1.319,81 euros brutos al mes a recibir sólo 1.001,03 brutos al quedar subrogadas a la firma Fundosa. El ahorro bruto mensual para Ilunion era de 4.781,7 euros entre todas las afectadas por la maniobra.
Ante tal práctica, el Consell, a través de la Conselleria de Economía Sostenible -de quien dependen las competencias autonómicas en materia de Trabajo- ha reaccionado expedientando a ambas firmas por cesión ilegal de trabajadores. Lo ha hecho tras comprobarse los hechos en la preceptiva inspección de trabajo realizada en el hotel en cuestión.
Sanciones «muy graves»
En consecuencia, ambas firmas han sido sancionadas con una multa de 6.251 a cada una y el retorno de las subvenciones recibidas por parte de la administración autonómica. Sólo en 2015 firmas del Grupo Ilunion recibieron decenas de miles de euros en subvenciones por parte de la Generalitat, según recoge el Diari Oficial de la Comunitat Valenciana. Pese a que las cantidades no son abultadas, las sanciones están tipificadas como «muy graves» por el Gobierno valenciano.
No obstante, más allá de las consecuencias económicas, el expediente del Consell supone un fuerte escarnio público para la rama empresarial de la Once, que entre sus objetivos presume de apostar por «sectores generadores de empleo para personas con discapacidad, garantizando la sostenibilidad social ante un mercado económicamente global».
Preguntadas al respecto, fuentes oficiales de Ilunion trasladan a este diario que el grupo, tras ser expedientado, ha anulado el recorte salarial que aplicó a las limpiadoras. La firma, sin embargo, manifiesta discrepancias sobre las sanciones de la Generalitat y ha ha optado por recurrirlas.