Trasladamos varias ideas:
1. La posición de la CGT de Catalunya con relación a la cuestión nacional y al derecho de autodeterminación está recogida en diversos acuerdos de congreso (Barcelona, Lleida, etc) y a grandes rasgos se sintetiza en: a) un reconocimiento al derecho de autodeterminación, 2) la consideración que esa autodeterminación, como expresión de la autogestión, afecta a los diferentes aspectos de la vida individual y colectiva, 3) la premisa de que un estado (y con ello la creación de un nuevo estado) no permite ningún proceso de liberación y 4) la consideración de que los procesos de autodeterminación y autogestión no se han de circunscribir en procesos electorales, sino en espacios de participación ,asambleas, etc.
2. Durante los años del llamado “Proceso catalán” la CGT de Catalunya se ha mantenido al margen. Ha considerado que se trataba de una iniciativa capitalizada por un sector de la burguesía catalana, que había tenido la habilidad de ponerse al frente de una movilización popular, de carácter transversal, muy importante. Puntualmente, desde la CGT de Catalunya se han ido emitiendo algunos posicionamientos que han buscado como reproducir los acuerdos mencionados y han señalado la desconfianza esa burguesía, así como el rechazo a un nuevo estado (así como al estado actual) como forma de organización de la sociedad.
3. En este sentido, la CGT de Catalunya (a diferencia de CCOO, UGT y USOC, entre otros sindicatos) se ha mantenido fuera del Pacto nacional por el Derecho a Decidir. Igualmente, tampoco ha ofrecido sus locales para realizar el referéndum.
4. En los últimos meses la CGT de Catalunya ha aumentado su presencia pública debido a una intensificación de la actividad sindical. Esta intensificación se ha concretado en estar presentes en una parte muy importante de los conflictos laborales en Catalunya y en la realización de diversas huelgas a las que la organización en su conjunto ha apoyado también en el plano mediático. En diversas ocasiones desde sectores ajenos a la organización, principalmente de medios de comunicación, tertulianos y partidos políticos, se ha acusado a CGT de actuar al compás de algún partido o interés político institucional. Varios ejemplos: 1) en la huelga de enseñanza de enero, en contra los presupuestos pactados por el gobierno catalán y la CUP, se nos tildó de “lerrouxistas españolistas” y agentes del CNI (comparándonos con la actuación de la CIA contra Allende) y 2) en la huelga de Metro se nos dijo que le hacíamos el juego al PDCAT para atacar a Colau. En definitiva, una mayor presencia en conflictos a partir de los intereses de la propia organización y de los trabajadores/as, intenta ser capitalizada de forma variable por agentes externos.
Actuación en la situación actual
Durante el mes de setiembre la situación en Catalunya con relación al referéndum convocado por el Parlamento catalán para el pasado 1 de octubre experimentó una evolución remarcable. Hubo un desembarco de miles de policías nacionales y guardias civiles y, en paralelo, diversas actuaciones judiciales de carácter represivo hacia esta iniciativa. La guardia civil y la policía llevaron a cabo registros en medios de comunicación locales, en imprentas, almacenes, ayuntamientos…. Se han iniciado procesos penales por sedición contra unos 700 alcaldes, trabajadores públicos y algún alto cargo, así como contra los asistentes a las manifestaciones del 20 de septiembre en Barcelona. Se han cerrado páginas webs (algunas de grupos antirrepresivos). Cientos de directores de centros escolares recibieron notificaciones por parte de la policía (los mossos d’esquadra) de que incurrían en un delito penal si en su escuela no impedían la realización del referéndum. Trabajadores y trabajadoras de los puertos también han padecido y siguen padeciendo el acoso policial, con registros, amenazas, etc. A parte, el día 1 de octubre la represión policial con asalto a colegios, uso de pelotas de goma y gases lacrimógenos fue general en gran parte del territorio, con cientos de heridos/as.
En ese contexto, desde CGT de Catalunya ya durante el mes de setiembre se realizaron posicionamientos públicos en contra la represión y en defensa de las libertades. En su conjunto, las diferentes federaciones territoriales fueron realizando comunicados en el mismo sentido y llamando a la movilización en contra la represión. En paralelo, el conjunto del movimiento libertario catalán se posicionó en el mismo sentido, en algunos casos llamando también a la defensa del referéndum (cosa que CGT Catalunya evitó decir).
La propuesta de huelga general del día 3 de octubre se planteó bajo este escenario, como rechazo a los efectos de esta represión en los trabajadores y trabajadoras. Dados los plazos y la velocidad con la que se sucedían los acontecimientos, la decisión de convocarla se tomó en una plenaria extraordinaria con posterioridad a la presentación del preaviso. Finalmente ese día confluyeron 4 convocatorias formales huelga (CGT, IAC, CSC y COS). A parte, tanto CNT-AIT como SO realizaron llamados claros a la secundar la huelga. Así mismo, parte del movimiento libertario catalán (CGT, CNT-AIT, SO, Embat, Negres Tempestes, Grup de Reflexió per l’Autonomia, etc) hicieron un manifiesto conjunto al respecto. Otros, como la Federació Anarquista de Catalunya, mostraron posiciones propias en las que daban apoyo a la realización del referéndum, estando disconformes con la pregunta realizada, a la par que realizaban un llamamiento a confrontar la espiral represiva del estado.
Para el desarrollo de la huelga, ver la documentación adjunta.
Con posterioridad al día 3 de octubre desde CGT-Catalunya se ha mantenido una actuación de espera. Los actos represivos contra el conjunto de la población (y especialmente contra trabajadores/as) han disminuido de forma clara. Ha habido un cierto incremento de actuaciones de grupos de extrema derecha pero desde los cuerpos de seguridad parece que hay una especie de tregua. En este contexto, CGT-Catalunya he evitado apoyar o adherirse a sendas convocatorias de huelga general que dos sindicatos (CSC e IAC) habían convocado, en intervalos sucesivos, para los días 9 a 20 de octubre. Finalmente, estos sindicatos han retirado las convocatorias que, al menos en un caso, han sido declaradas ilegales por el Tribunal Superior de Justicia de Catalunya.
A modo de valoración.
Más allá de la consideración tengamos sobre el llamado “Proceso catalán”, que ha ido quedando reflejada en los diferentes posicionamientos de la CGT de Catalunya, a nadie se le escapa que en Catalunya y el resto del estado estamos viviendo una intensificación del autoritarismo. Este proceso ya viene de lejos, con la represión a huelgas generales, a movimientos sociales y a nuestro sindicato, la aprobación de la Ley Mordaza y la reforma del Código Penal. En las últimas semanas, en el escenario derivado del referéndum del 1 de octubre, en Catalunya la represión ha adquirido una especial intensidad, con medidas que pueden ser aplicadas a muchos otros contextos. En otros lugares, como Zaragoza, Valencia (a otro nivel, Múrcia) o Madrid estamos viendo también como se concreta este aumento del autoritarismo y la recuperación de un lenguaje y unos referentes claramente franquistas. Más allá de aclaraciones presentes o futuras, la CGT de Catalunya seguirá actuando, en el terreno de su ámbito, como mejor considere en base a los principios de confederalismo y autonomía y al amparo de los diferentes acuerdos de CGT, tanto a nivel confederal estatal como catalán.