El Gobierno griego reducirá pensiones,
salarios y despedirá a más funcionarios públicos, como parte de severos recortes presupuestarios por valor de 11 500
millones de euros, informó hoy el Ministerio de Finanzas.
Una considerable parte de esa cantidad —unos 4 000
millones de euros— provendrá de la reducción de las pensiones de la ciudadanía y de la limitación o desaparición, en
algunos casos, de servicios de la seguridad social.
Sobre el reajuste de las jubilaciones, el Gobierno todavía tiene
que decidir la escala de recortes a aplicar (estimada en un rango del dos hasta el 15 %). Esta será la cuarta vez que se
recortan las pensiones desde el 2010, cuando Grecia aceptó el rescate financiero de la Unión Europea y del Fondo Monetario
Internacional (FMI), los cuales impusieron a Atenas como condición de acceso al dinero que aplicase duros ajustes para
sanear su economía.
Desde entonces, la población griega ha sido la más afectada por los recortes. Ejemplo de ello es
que las jubilaciones cayeron hasta en un 40% desde el 2010.
Conforme a los planes gubernamentales, los salarios en
las empresas públicas bajarán entre un 30 % y un 35 %.