absorver a los trabajadores del servicio de cocina. La empresa Centros Residenciales Savia S.L, que tiene entre sus
consejeros a Vicente Cotino Escriva, -sobrino del conseller Juan Cotino- y a Enrique Ortiz -empresario implicado en la trama
Brugal-, lleva desde finales de diciembre presionando a los trabajadores de la contrata del servicio de cocina -que tiene
suscrita con la firma Comislagun- para que firmen la baja voluntaria con su actual empresa, con la intención de «absorberlos
como operarios propios».
Así lo atestiguan desde los sindicatos UGT, CGT y CC OO, que no
dudan a la hora de denunciar la «ilegalidad» de una decisión que afectará a más de cien trabajadores. Como telón de fondo, y
siempre según los sindicatos, descansan las intenciones de Savia de cambiar la situación jurídica de los operarios, «quieren
sustituir el actual convenio de Hostelería por el de Geriatría, con lo que verían mermados muchos de sus derechos
legales».
Javier Gil, secretario general del sector de la Hostelería de UGT en la C. Valenciana, comentó que «hablamos
de un caso de terrorismo laboral. Quieren saltarse el marco legal vigente. Es como volver la vista un siglo atrás: el patrón
manda, los operarios callan. De hecho, han dado la orden expresa de que no van a hablar con los sindicatos».
El portavoz
de UGT explicó que «con su modo de actuar se saltan el artículo 44 del Estatuto de los Trabajadores y el artículo 41 del
actual convenio de Hostelería en la C. Valenciana. Lo que deberían hacer es subrogar a todos los profesionales con más de
cuatro meses en la empresa implicados y mantenerles las condiciones. Este tipo de operación no les interesa. Quieren utilizar
la actual situación de crisis en su provecho».
Modus operandi
El modus operandi denunciado es claro: desde
diciembre los trabajadores que prestan el servicio de cocinas en los 21 centros que Savia tiene diseminados por la C.
Valenciana por parte de Comislagun han sido llamados para una entrevista personal por la firma de los Cotino y Ortiz.
Luis Fontestad (CGT) fue uno de los operarios llamados a filas, «el director de recursos humanos de Savia -Manuel Maestre-
me citó. Cuando me presenté y le dije que iba a grabarlo todo con el móvil me dijo que habíamos terminado». A su vez,
confirmó que «conozco a muchos compañeros que sí han hecho la entrevista, de hecho tengo un cuestionario tipo. Hay preguntas
muy raras, como si comes comida exótica si vas al extranjero, si has ido a una manifestación contra el racismo…». Fontestad
explicó que «también les piden un currículum y la vida laboral. Está claro que no quieren respetar los tramos de antiguedad
adquiridos».
Por su parte, Javier Calatrava -delegado sindical de CC OO y presidente del comité de empresa de
Comislagun- confirmó que «hemos enviado un burofax a Savia para que tengan constancia de que conocemos la situación y de que
queremos reunirnos con ellos para tratar el tema». De momento, no han recibido contestación alguna.
El contrato que une
a Savia y Comislagun finaliza el próximo mes de abril. Entre los trabajadores de la firma reina la intranquilidad por los
movimientos realizados desde geriátrica y se rumorea que la quiere adelantar la rescisión.
De momento, no se ha suscrito
ninguna baja voluntaria. Javier Calatrava confirmó que «hemos dicho que no firmen ningún papel procedente de cualquiera de
los dos empresas sin haber sido asesorados debidamente por los servicios jurídicos de los sindicatos».
Publicado
trata-cotino-ortiz/780580.html