Durante los más de dos
años y medio de existencia de la PAH hemos hecho todo lo posible para frenar los desahucios.
Frente a una ley
injusta que permite a las entidades financieras echar a las familias de sus casas al mismo tiempo que les sigue reclamando
buena parte de la deuda de por vida, hemos agotado las vías judiciales y administrativas para defender los derechos más
básicos:
- Hemos intentado negociar con cajas y bancos para que
aplicaran la dación en pago y dejaran permanecer a las familias en régimen de alquiler social.
- Hemos
intentado lograr justicia a través de los tribunales.
- Hemos intentado cambiar la ley en el
Congreso.
- Hemos intentado que los ayuntamientos defiendan a sus ciudadanos impidiendo los desahucios
por motivos económicos.
No ha sido en balde. Hemos puesto el problema en la agenda política y en
algunas ocasiones hemos logrado pequeñas grandes victorias: daciones en pago, posponer decenas de desahucios,
familias realojadas en régimen de alquiler asequible, decenas de mociones de ayuntamientos que se han sumado a la
exigencia de cambiar la ley.
Sin embargo, en demasiadas ocasiones una y otra
vez hemos topado con la arrogancia de las entidades financieras, con la injusticia de una ley que sobreprotege a los
bancos y con la cobardía de unas administraciones que no se atreven a poner límites a la avaricia del sector
financiero.
Así que: Ante la creciente oleada de desahucios. Ante la dramática situación en la que se
encuentran centenares de miles de familias. Ante unas administraciones públicas sin voluntad política para dar respuesta a
una situación de auténtica emergencia habitacional. Ante un Estado fallido incapaz de garantizar los derechos más
elementales y de atajar la sangría de desalojos que se producen cada día (más de 240 en todo el Estado). Ante unos
poderes públicos que anteponen los beneficios de la banca a la solvencia y supervivencia de las personas. Ante la
actuación antidemocrática y caciquil de PSOE y PP que bloquean en la mesa del Congreso la ILP sobre dación en pago
retroactiva, moratoria de desahucios y alquiler social promovida entre otras organizaciones por la PAH. Ante a los
nuevos dispositivos que pretenden desactivar las concentraciones ciudadanas contra los desahucios,
la PAH
quiere gritar alto y fuerte que: Ni las multas, ni las sanciones administrativas, ni el intento de criminizalización del
movimiento, ni las fechas abiertas emitidas por algunos jueces con el objetivo de impedir las concentraciones, ni las
actuaciones policiales que a traición se presentan horas antes de la establecida por el juez para hacer efectivo el
desahucio, lograrán detener el movimiento ni acallar nuestras voces.
Ante nuevos escenarios, nuevas y mejores
estrategias. La PAH lanza su nueva campaña. Una campaña que estamos convencidos marcará un punto de inflexión.
Una campaña que persigue la reapropiación ciudadana de aquellas viviendas vacías en manos de entidades financieras
fruto de ejecuciones hipotecarias. De manera que en aquellos casos en que las concentraciones ciudadanas no consigan
paralizar los desalojos la PAH apoyará y dará cobertura a las familias para que no se queden en la calle. El objetivo
es triple : Primero, recuperar la función social de una vivienda vacía para garantizar que la familia no quede en la
calle. Segundo, agudizar la presión sobre las entidades financieras para que acepten la dación en pago. Y tercero, forzar
a las administraciones públicas a que adopten de una vez por todas las medidas necesarias para garantizar el derecho a
una vivienda.
La Campaña “Obra Social la PAH” nace para hacer efectivo el Derecho a una vivienda digna
recogido en el artículo 47 de la C.E., en el artículo 25 de la Declaración Universal de los DDHH así como en
el artículo 11 del PIDESC (Pacto Internacional de Derechos Económicos Sociales y Culturales) y sistemáticamente
vulnerado por el Estado Español.
Fuente: PLATAFORMA DE
AFECTADOS POR LA HIPOTECA