- La negociación colectiva es una herramienta del diálogo social a partir de la cual se acuerdan y establecen las “reglas” del juego de la empresa. Es un derecho fundamental que garantiza la libertad sindical. Y es la herramienta que tenemos las trabajadoras y los trabajadores para mejorar nuestras condiciones laborales.
- Tenemos que acabar con el intervencionismo político y la desidia de las empresas: es el momento de la unidad sindical.
PRÁCTICAS ANTISINDICALES
Las plantillas del sector público ferroviario hemos sufrido demasiados atentados contra nuestro derecho a la negociación colectiva. El entramado burocrático de peticiones de información y de autorización de acuerdos y preacuerdos a un sinfín de instancias administrativas (Secretarías de estado, Comisión Ejecutiva de la Comisión Interministerial de Retribuciones, Ministerios, etc.), en la práctica, vacía de contenido la libertad sindical de las trabajadoras y los trabajadores del sector.
En Adif, hemos visto cómo en todo el proceso de negociación de las 35h la empresa, el Ministerio de Transportes y el Ministerio de Hacienda han ninguneado a la plantilla y su derecho a la representación colectiva. La ineptitud y la desidia de la Dirección General de Gestión de Personas han hecho el resto.
Lo hemos visto también en Renfe, donde no se desatasca la eliminación de las indignas categorías de ingreso.
En Logirail, seguimos pendientes de la autorización del III Convenio Colectivo y ello pese a que la mano de Hacienda se ha dejado sentir durante toda su negociación.
RESPUESTA DEL SECTOR
El sector público no puede seguir así. El shock colectivo de la crisis económica de 2008 permitió que llegáramos a esta situación, con recortes indiscriminados y las alargadas sombras de Europa y de Hacienda. Pero ya no puede servir de excusa. Tenemos que acabar con el intervencionismo político y la desidia de las empresas, que han entorpecido y maniatado la negociación colectiva.
El contexto del sector público ferroviario es inquietante. Negociación colectiva secuestrada, privatizaciones encubiertas, segregación de empresas públicas… El ataque al sector es furibundo y tiene muchos frentes. Como ferroviari@s debemos plantarnos y ofrecer una respuesta contundente y unificada ante esta agresión orquestada.
Es la hora de la movilización. Tod@s a una para detener la degradación de nuestros derechos y de nuestras condiciones laborales. Necesitamos recuperar el derecho a la negociación colectiva.
UNIDAD SINDICAL
Es el momento de dar la cara. Todo lo que está pasando es lo suficientemente grave como para plantarse ya de una vez por todas. Desde CGT apostamos por la unidad de tod@s l@s trabajadores para defender nuestro futuro. Y apelamos a las demás fuerzas sindicales a calzarse las botas y bajar al barro para defender nuestros derechos.