Desde el Sector Ferroviario, la Sección Sindical de CGT-Valencia demandamos que en los puestos de trabajo esenciales del sector ferroviario haya solo el personal imprescindible y con las adecuadas medidas de seguridad. Quedémonos en casa, es nuestra responsabilidad, es su responsabilidad.
Desde que comenzó la crisis del coronavirus, la sociedad se ha concienciado rápidamente de multitud de situaciones extraordinarias que han pasado a pertenecer al diccionario cotidiano.
Una de estas circunstancias, es que hay que permanecer confinad@s en nuestras residencias la mayor parte de la población, todas a ser posible, con la única salvedad de las personas que aportan su trabajo para que la sociedad pueda seguir funcionando en este momento o su aportación mejore o palíe la situación.
Desde CGT estamos detectando innumerables actividades que en nada son esenciales, y que empresarios sin escrúpulos siguen obligando a sus trabajadores y trabajadoras a que acudan a los puestos de trabajo, a veces con amenazas veladas y otras de manera directa, poniendo en riesgo a ellas mismas, a sus familias y a toda la sociedad.
Pero no solo ocurre con las empresas privadas, sin ir más lejos y en este caso el Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana y sobre todo, en las empresas públicas Renfe y Adif, así como en las empresas que realizan servicios complementarios, como Ferrovial, Logirail, etc, que han asumido restricciones, en algunos casos, pero, qué, en otros han mantenido las circulaciones y el servicio normalizado, sin causa objetiva justificada.
Tenemos ejemplos en todos los servicios, tanto en transporte de viajeros, como en los de mercancías. En el primero, y desde el inicio de la crisis, se ha mantenido el 100% de las circulaciones de cercanías, y ello, quizá invitó a que el primer día laborable después del confinamiento general, hubiera aglomeraciones parecidas a las de un día de trabajo ordinario.
Después de las medidas correctoras, la demanda de transporte colectivo ferroviario bajo rápida y drásticamente hasta menos del 5%, que se ha mantenido posteriormente, pero, inexplicablemente, el servicio de cercanías se mantenía, todavía, en el 100%, y los de Media y Larga Distancia, junto al AVE, en el 50%, con una ocupación máxima, que no podía sobrepasar técnicamente el 30% de usuarias por tren. Evidentemente, mantener ese servicio, es exponer al personal a un riesgo innecesario tanto en el puesto de trabajo, como en los desplazamientos hasta el.
Un nuevo Real Decreto, establece, a partir del lunes 30 de marzo, rebajar todavía más estas reducciones, que pueden llegar en algunos momentos al 70%, mucho mas razonable dadas las circunstancias, pero mantiene las cercanías en el 80% de servicio, con una ocupación tan mínima que requeriría la paralización casi absoluta. Ademas, paradójicamente, en Valencia, hay días en que han circulado más trenes que un día ordinario de meses anteriores, con la irresponsabilidad que ello implica de cara a los trabajadores y trabajadoras. Incluso, en plena crisis, se pretendió realizar la formación de manera practica del personal, demostrando una gran falta de empatía y responsabilidad con la situación actual.
Desde esta Sección Sindical hemos detectado trenes que han circulado con más personal de servicio, que usuarias, por ejemplo los Euromed que parten desde Alacant, con Maquinista, Interventora, y tres tripulantes, para el mismo número de usuarias, o trenes entre Valencia y Alacant, que en condiciones normales no realiza servicio personal de intervención, y que ahora lo hace, con el riesgo que conlleva este puesto de trabajo, por el trato directo con las personas usuarias.
Pero, esto, no solamente ocurre en el servicio de viajeros, los trenes de mercancías, que en principio, parecían imprescindibles para garantizar el abastecimiento a la población, continúan con el volumen de tráfico anterior a la crisis, sin ninguna reducción, transportando todo tipo de mercancías, necesarias e innecesarias, manteniendo un volumen de trabajo y trabajadores igual al anterior, con lo que todo esto conlleva, para la seguridad de los trabajadores, tanto ferroviarios como de las Terminales de carga y descarga, transportistas por carretera, operarios en fábricas, que siguen sacando producción, para que algunos sigan llenándose los bolsillos a costa de poner en peligro la salud de sus trabajadores.
Por ejemplo, en las Terminales Ferroviarias de Fuente de San Luis, Sagunt o la Terminal de Silla, pertenecientes a Adif sigue trabajando la plantilla completa, dando relevos en cada turno, con lo que el número de trabajadores en los vestuarios, duchas, comedor es el mismo que en cualquier jornada laboral. haciendo muy difícil mantener la distancia de seguridad recomendada, asimismo las instalaciones se limpian soló una vez por día realizándose tres turnos de trabajo, y los propios trabajadores se limpian las locomotoras en los relevos con un spray de agua y lejía suministrado por la empresa, pero, tienen que utilizar medios personales para secar sus útiles de trabajo, todo ello, evidencia que las medidas de prevención son escasísimas o inexistentes.
Si el trabajo se redujera a lo realmente esencial, podría disminuirse el personal, como mínimo, en un 35%, rebajando el riesgo de exposición en el mismo porcentaje. Consideramos que los trabajadores del Sector Ferroviario son una parte esencial para garantizar el transporte de productos de primera necesidad, pero se podría reducir el número de mercancías a lo estrictamente indispensable, reduciendo el personal en cada turno y por tanto los riesgos de contagio.
Desde estas Terminales siguen saliendo y entrando los mismos trenes que antes de comenzar la crisis, pero, en muchos casos, con contenedores vacíos en ambos sentidos y los que circulan llenos, en muchos casos, con mercancías que en nada son esenciales. Hemos detectado mercancía para grandes cadenas de ropa, que nada aportan en esta crisis, y además, se encuentran cerradas en el Estado de Alarma actual.
Nos parece una auténtica barbaridad poner en riesgo a las personas trabajadoras, y sus familias, de manera gratuita, solo por mantener una producción que significa una menudencia en toda esta crisis, y que demuestra la escasez de escrúpulos de quienes anteponen la economía, a la propia vida, evidentemente, cuando no está en riesgo la suya.
Tampoco entendemos como desde que se decretó el estado de alarma, en los talleres de Fabricación y Mantenimiento del Grupo-Renfe de Valencia-Fuente San Luis se sigue haciendo el mantenimiento de vehículos que están en los Talleres y que por el tipo de mantenimiento, no van a prestar servicio en un largo periodo de tiempo. Para estos trabajos los compañeros están en un estrecho contacto directo, sin poder mantener la distancia de seguridad y sin ningún tipo de protección (mascarillas, guantes, etc), ademas, de escasa limpieza en los trenes, vestuarios y zonas comunes.
Entendemos que somos un servicio público especialmente conocedores de nuestro trabajo, pero, con un pequeño reten rotativo de trabajadores, se podría prestar un servicio adecuado, minimizando, así, el riesgo de los trabajadores y trabajadoras, y los de sus familias. Esta lógica medida de protección y organización que la dirección no quiere adoptar, permitiría colaborar de manera activa en la erradicación de esta pandemia.
No solo hay que repetir los slogans de “quedate en casa” hasta la saciedad, el Ministerio, y las empresas de titularidad pública deben hacerlos cumplir, somos conscientes de nuestra responsabilidad, queremos actuar, lo estamos haciendo, pero, no queremos que jueguen con nuestra vida de manera gratuita. Nuestra reivindicación es muy clara, solo deben trabajar los puestos de trabajo imprescindibles, y los que lo hagan, con las correctas medidas de seguridad.
CONFEDERACIÓN GENERAL DEL TRABAJO